ESTA ERA GHEISA CUANDO LLEGÓ A NOSOTROS

Gheisa y su hermano Karín, fueron abandonados en un polígono industrial. Durante mucho tiempo estuvieron con nosotros hasta que un día, alguien haciendo turismo por la ciudad, pasó por delante de dónde se encontraban y los vió. El flechazo fué instantáneo. Ambos se fueron juntos adoptados y jamás podríamos haber imaginado un final mejor.

Gheisa, siempre serena, la combinación perfecta del travieso de su hermano.

Este final es la demostración de que los sueños se hacen realidad. Feliz vida.